¿Tienes preparadas las doce uvas de la suerte para mañana? Aunque aún no te hayas dado cuenta, el año 2015 está a punto de terminar. Puede que no seas consciente de ello hasta que suenen los cuartos, pero ya hay muchos que están haciendo balance de los 364 días que han pasado y los que propósitos que están por venir.
En Impacting te proponemos una nueva meta para incluir en los deseos del año 2016: evaluar más. Nos referimos a esas campañas de email marketing que se preparan con tanto cariño, paciencia y profesionalidad y confiamos hagan el efecto esperado. No debemos sólo confiar en que se cumpla el retorno buscado, sino que debemos de comprobarlo.
Puedes comenzar con unas preguntas sencillas: ¿cuántas personas se dan de baja en tu lista? ¿Con qué frecuencia alguien te pide dejar de recibir comunicaciones? Ésta es una forma de medir la fidelidad de tus seguidores, la calidad de tus contenidos y la conexión entre ambos. No dejes de prestar atención a estos aspectos en el próximo 2016.
Otra cuestión que te ayudará a mejorar tu campaña de email marketing es la geolocalización. Para ello, debes conocer el lugar donde están tus nuevos suscriptores, así como los sitios donde son abiertos los correos electrónicos que envías. Este tipo de aspectos te servirán para perfeccionar tus envíos.
La cuantificación también puede ser útil, pero hay que registrar estos índices regularmente para observar la comparativa. Número de aperturas de un email, cuántos clicks se han hecho en los enlaces incluidos en el correo, desde qué dispositivos se abrió cada correo electrónico (ordenador o móvil), etcétera. Son algunos ejemplos de cosas que no deben obsesionarnos, pero sí ayudarnos a perfeccionar las campañas.
Vigila tus palabras clave, especialmente en el asunto. Observa si variar estos aspectos influye en una mejor recepción del mensaje.
Controla también las fechas y horas de envío para saber cuándo le va mejor a tus clientes recibir las comunicaciones.
Los test A/B son una de las pruebas más conocidas. Se trata de preparar dos campañas similares, estableciendo algunos criterios variables, para luego evaluar por separado y conocer qué ha funcionado mejor en cada una de ellas.
Por último, no dejes que la fórmula ensayo- error te desanime. El 2015 seguro que te ha dejado un montón de cosas por mejorar, pero para eso llega el 2016: para que puedas perfeccionar tu técnica.